#JuegaConOrgullo: Google y YouTube lanzan campaña de cara al Mundial de Brasil

Apuntando a que “todos los atletas estén orgullosos de jugar”, Google anza su campaña #JuegaConOrgullo (#ProudToPlay), un hashtag presente en la página principal que enlaza a la cuenta de YouTube Spotlight.

Con el ánimo de lograr un consenso donde todos los deportistas estén orgullosos por el mero logro de su participación, la campaña aspira que converjan deportistas de todos los orígenes y todas las experiencias a través de una pasión compartida.

YouTube convoca en tal sentido a mantener el espíritu de conectar las distintas comunidades para hacer una diferencia, durante las distintas etapas de la próxima Copa Mundial de Fútbol 2014, en Brasil. Como horizonte, YouTube aspira crear “igualdad de condiciones para todos”, en el marco de este emprendimiento que se asemeja de algún modo al #ProudToLove, que con singular éxito se desarrolló el año pasado.

“Aplaudimos el coraje y la apertura de los atletas en todos los niveles que han salido y admiramos sus compañeros de equipo, amigos, familias y simpatizantes que son todos que prueben que no importa quién eres o que te gusta, lo que importa es que puedan dar su mejor esfuerzo”, puntualiza la red social de videos en relación a la campaña igualitaria.

Un video de alta calidad para impulsar a lo igualitario

En 2’02” el video lanzado este martes se inicia con una vista aérea de Río desde la óptica del Cristo Redentor, seguida por escenas que incluyen desde el fútbol en las playas cariocas a Pelé, la música de las “torcidas” y los jugadores más caracterizados del balompié.

Sin embargo excede el límite futbolístico alcanzando a Mandela, el basket, el fútbol americano, todos focalizando la eliminación total de cualquier tipo de discriminación dentro del deporte. “No importa a quien ames, lo que importa es marcar goles”, dice una de las participantes. “Es el gran momento de deporte, nosotros podemos marcar la diferencia”, resalta otro. “El deporte puede crear esperanza, donde antes solo había desesperación”, culmina diciendo Nelson Mandela, parte de uno de sus discursos.