CRIMINALIDAD

Disminuyen homicidios y copamientos, pero aumentan hurtos y rapiñas

El Ministerio del Interior constató una leve disminución de los homicidios y también de los copamientos durante el 2013 en comparación con 2012. Sin embargo, aumentaron los hurtos y las rapiñas consumadas.

Se indica que en todo el país en el 2013 fueron aclarados el 57% de los homicidios contra el 69% de aclarados en el 2012.

El Observatorio nacional sobre violencia y criminalidad  del Ministerio del Interior, presentó este jueves su informe anual sobre “violencia y criminalidad” en todo el país, correspondiente al año 2013.

En el informe se constata una disminución de los homicidios y copamientos, y por otro lado el aumento de hurtos y rapiñas.

A través del estudio se detalla que los homicidios consumados en el 2013 fueron 260, una cifra levemente inferior a la que se constató en el 2012 cuando hubo 267 casos. Lo que representó una variación de -3%.

Asimismo, en el informe se indica que el 31% de los homicidios ocurridos en todo el país fue por “conflictos entre criminales y ajustes de cuentas”, la siguieron como causa de muerte las “rapiñas, copamientos y hurtos” con un 23%, y la “violencia intrafamiliar” se ubicó en el tercer lugar con 17%.

También se informa que entre los casos de homicidios aclarados el 17% fue a manos de menores de edad en el 2013, contra el 21% de participación de menores en el 2012.

El 61% de los homicidios fue a causa de armas de fuego y el 39% por otros medios.

Se indica que en todo el país en el 2013 fueron aclarados el 57% de los homicidios contra el 69% de aclarados en el 2012. La mayoría de los homicidios (163) ocurrieron en Montevideo, mientras que en Canelones fueron 33,  y 16 en Rivera.

Por otro lado, en el informe se asegura que los copamientos en todo el país fueron 290 en el 2013, contra 257 que se registraron en el 2012.

Rapiñas y hurtos

Las rapiñas consumadas en el 2013 fueron 16.718, mientras que en el 2012 habían sido 15.414 casos, ello representó un aumento de 8,5%.

La mayor cantidad de rapiñas en el 2013 fueron a “transeúntes” (7.081 casos), mientras que a “comercios” se registraron 2.340 casos y a “motociclistas” 1.640.

El 81% de las rapiñas fueron en Montevideo (13.572 casos), el 13% en Canelones (2.237 casos), y el restante 6% distribuidas en el resto del país.

Los hurtos consumados en el 2013 fueron 97.465, mientras que en el 2012 habían ocurrido 96.827, ello representó un aumento de 0,7%

El Observatorio aclara que “en virtud de su gran volumen, muchas unidades policiales registran con algún retraso, en el Sistema Informático del Ministerio, las denuncias de hurto que reciben.

Por esta razón, “las cifras de hurtos consumados correspondientes a 2012 difieren de las publicadas en el informe anual correspondiente a dicho año (la diferencia corresponde a información ingresada en el Sistema de Gestión de Seguridad Pública con posterioridad a la publicación del referido informe)”.

“El mismo retraso se produce para los datos de 2013, por lo cual seguramente las cifras reportadas en el cuadro subestiman ligeramente el incremento correspondiente a este último año”, se aclara en el informe.

Por otro lado, también se asegura que los “hurtos a viviendas” en 2013 fueron 21.923 casos, a “vehículos” 17.305, y a “transeúnte” 16.024.

Entre otros delitos,  las “violaciones” fueron 290 en 2013 y 257 en el 2012,  y las “lesiones” fueron 9.245 contra 9.394 respectivamente.

Análisis

El director del Observatorio, Javier Donnángelo,  remarcó que los homicidios mostraron una cifra “ligeramente inferior, y sigue siendo el uso de armas de fuego el factor principal que interviene en los mismos”.

Las rapiñas “abandonaron la tendencia de desaceleración que venían experimentando en los años inmediatos anteriores, con un visible desplazamiento de los blancos u objetivos de las mismas que explicarían la razón del incremento”.

Respecto a los hurtos, “mantienen estabilidad con los datos inmediatos del año 2012, registrando un incremento marginal sin mayor incidencia para el análisis”.

Donnángelo dijo que “durante 2013 se produjeron 260 homicidios en todo el territorio nacional, una cifra ligeramente inferior a la que se verificara durante 2012 (267 casos). En lo esencial el número de homicidios se ha mantenido estable entre ambos años”.

“Aunque esta estabilidad se produce en niveles relativamente altos para la tendencia histórica en el país, los valores correspondientes a 2013 no difieren apreciablemente de cifras verificadas en el país durante épocas recientes. Así, durante los años 1997 y 1998, se produjeron, respectivamente, 243 y 244 homicidios en Uruguay, es decir, apenas unos 15 casos menos que los acontecidos el año pasado”, aseguró.

En términos relativos a la población del país, los datos representan una tasa de “7,9 homicidios cada 100.000 habitantes”.

“De acuerdo a los últimos datos divulgados por las Naciones Unidas en 2011, esto ubica al Uruguay apenas por encima del promedio mundial (6,9 por 100.000), y muy por debajo del promedio de las Américas (16 por 100.000)”, destacó el especialista.

Destaca la “disminución en la participación de autores menores a 18 años, que pasó de 38 en 2012 a 26 durante 2013”.

El valor correspondiente a 2013 fue, a su vez, “idéntico al verificado durante 2011. Esto sugiere que el ligero incremento que han experimentado los homicidios entre 2011 (199 casos) y 2013 (258 muertes), no puede ser explicado en términos del aumento de las muertes causadas por adolescentes, dado que el número de éstas fue exactamente el mismo durante 2011 que durante 2013”.

Agregó que “parecería, en este sentido, que aun si se lograra abatir fuertemente la participación de adolescentes en este tipo de hechos (un objetivo plenamente deseable), el número total de homicidios no sufriría variaciones de gran entidad.

Donnángelo dijo que en cuanto a las circunstancias precipitantes de los homicidios, “se observa un predominio de situaciones en que las víctimas tenían profusos antecedentes penales y, adicionalmente, el ‘modus operandi’ de los autores sugiere la presencia de formas de actuación criminal relativamente organizadas, con mayores niveles de premeditación y acceso a armas con mayor poder de destrucción”.

El nivel de esclarecimiento de los casos ocurridos durante 2013 “es algo inferior al de los dos años precedentes (sólo un 57 %)”.

“En parte, esta diferencia obedece a que muchos homicidios se aclaran bastante tiempo después de ocurridos”, expresa.

Por otro lado indica que las denuncias de rapiña experimentaron un “crecimiento del orden del 8,5% respecto del año 2012 (hubo 16.718). Este patrón interrumpe una tendencia a la desaceleración del crecimiento de esta modalidad delictiva, que entre 2010 y 2012 había registrado incrementos decrecientes”.

Mientras que las denuncias de hurto “han experimentado un incremento marginal durante 2013 (0,7%), que está dentro de los límites de variación entre los que se han movido las cifras de este tipo de delito durante los últimos años”.

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