TEMPORADA

Rocha está que revienta, la capacidad hotelera a punto de ser colmada

Los balnearios y playas rochenses están completamente llenos de turistas esta primera quincena de enero, haciendo que las capacidades hoteleras del Departamento estén al borde de ser absolutamente colmadas. Se estima un importante incremento del número de turistas con respecto al año anterior.

El turismo es mayoritariamente uruguayo, aunque también se pueden encontrar grupos de argentinos y brasileros.

Todavía es demasiado temprano para hablar de números exactos, pero las autoridades de Rocha se han manifestado más que satisfechas con la cantidad de visitantes que hoy se pueden encontrar en las costas de su Departamento. En estimaciones iniciales, desde el peaje de Garzón, que separa a Rocha con Maldonado, se calcula el paso de unos 5.000 autos más que en el mismo período del año pasado, según consigna el medio digital esteño La Paloma Hoy

El Director de Turismo de Rocha, Pedro Quartino, manifestó que los operadores turísticos y hoteleros del Departamento están muy conformes con el turismo mostrado. “No tenemos números porque esto recién comienza, pero los operadores de La Paloma están conformes con el trabajo que están teniendo, hay muy buen nivel de ocupación”, indicó a un medio de esa localidad.

Actualmente los hoteles rochenses están ocupados en un 90%, mientras que otros establecimientos turísticos como campings, hosteles y posadas se encuentran prácticamente colmados.

Mayoría de turismo interno

Según Mario Barceló, subsecretario de comunicación de la Intendencia de Rocha, el turismo es mayoritariamente uruguayo, aunque también se pueden encontrar grupos de argentinos y brasileros. “El turista uruguayo está gastando bien, el brasilero gasta poco y el argentino a raíz de las limitaciones impuestas a las tarjetas y un cambio desfavorable, gasta menos que en otros años”, dijo el jerarca a La Paloma Hoy.

Según la intendencia rochense, los principales focos son La Pedrera, Punta del Diablo y Aguas Dulces, este último contando con gran presencia de turistas brasileños. Actualmente, en La Pedrera no se encuentran habitaciones ni camas disponibles, mientras que en Punta del Diablo sucede algo similar, más allá del gran desarrollo que su capacidad de alojamiento ha tenido con respecto a años anteriores.

Tan solo dos días atrás, las autoridades del camping del Parque Santa Teresa debieron cerrar provisoriamente sus instalaciones para nuevos acampantes, luego de manifestar que sus servicios se encontraban completamente desbordados. Según sus cálculos, en ese momento había unas 12.000 personas instaladas en el parque.

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