TV digital abierta: pugna por nuevos canales se reaviva pese a anuncios de Mujica

Primero fueron los propios postulantes «perdedores» que hicieron pública su discrepancia con la exclusión presidencial. Voceros del proyecto La Diaria y el periodista Federico Fasano Mertens expresaron su desacuerdo con las razones aludidas para denegarles la concesión. No se trata de dos candidatos cualesquiera: La Diaria y Fasano habían quedado en primeros lugares de la «tabla» clasificatoria, aquella en la general y Fasano en todos los rubros de evaluación objetiva.

Mujica los descartó a ambos por razones de insuficiencia económica para afrontar sus proyectos, sostuvo el presidente desde Estados Unidos.

Tanto La Diaria como Fasano adelantaron que presentarían sus descargos en el plazo reglamentario, toda vez que el proceso adjudicatario no estaba formalmente concluído. Mujica todavía podía -puede- cambiar de opinión.

La izquierda, afuera

Fasano estaba tanto o más incómodo con la exclusión de La Diaria que con la suya propia. «Le voy a regalar un millón de dólares a La Diaria para que la izquierda pueda tener al fin un canal de TV«, se le escuchó exclamar en su ámbito cercano.

Parecido disgusto afectó a dirigentes del Frente Amplio, que no daban crédito a la eliminación de la izquierda en esta histórica oportunidad de «horadar el oligopolio conservador» de las tradicionales dinastías televisivas. Mujica había dicho que no se basó en razones ideológicas para tomar la decisión. Gente de su riñón, sin embargo, salió a buscar una «solución» in extremis a la desolación política que cundió en el frenteamplismo.

Pedro Buonomo y Daniel Frugoni, asesor presidencial y director de la Oficina de Planeamiento y Presupuesto (OPP) respectivamente, radicados ambos a pasitos del despacho de Mujica, corrieron a «buscar una salida», según consigna El Observador. En principio, a favor de La Diaria. Pero cualquier intervención en la cuestionada ejecución del proceso adjudicatario, amenaza tirar abajo todo su andamiaje.

Consorcio Pop, insolvente

Por si esto fuera poco, se conocieron en las últimas horas los datos contables de uno de los beneficiarios de la preferencia presidencial, la productora OZ que junto a la editorial Bla constituyen el llamado Consorcio Pop. Su análisis arrojaría una conclusión meridiana: no tiene solvencia económica. Resulta que sumados los patrimonios de ambas sociedades más los de todos sus socios (700 mil dólares), Consorcio Pop quedaría en el penúltimo lugar de (in)solvencia económica entre todos los concursantes (patrimonio cuatro veces menor al de Fasano, por ejemplo, que documentó US$ 2 millones setecientos mil). De confirmarse esta información, el juego de naipes que encumbró la candidatura de Pop, se vendría irremisiblemente al suelo.

Ahondando la paradoja, Consorcio Pop es el postulante que -exceptuando La Diaria- promete el menor aporte propio sin documentar (contra más del doble documentado por Fasano).

Con el único que nadie se ha metido por ahora, es con VTV, la señal subsidiaria del Tenfield de Paco, Enzo y Nelson, que recibirá de Mujica un canal de TV digital abierta, en competencia con los intocables 4, 10 y 12.

Todo lo demás está por verse.

Entre los descargos de los afectados, las gestiones políticas de última hora y la revelación de la insolvencia de OZ y compañía, todo puede pasar. La perinola sigue girando.