Carnaval en La Pedrera: igual pero con espirometrías y “ley seca” en la calle

En 2012, unas 20.000 personas desbordaron totalmente cualquier posibilidad civilizada para la noche del carnaval, máxime cuando los comerciantes ambulantes –que tenían prohibido vender alcohol- pasaron por alto la norma y vendieron hectolitros de cualquier “espirituoso”, además de los productos que tenían autorizados.

Este año 400 funcionarios –entre los cuales habrá unos 150 policías- serán desplegados en La Pedrera, para cumplir la orden de prohibir cualquier venta de productos en la calle, sin importar el rubro, a fin de evitar que se trasiegue alcohol clandestinamente.

Policía Caminera dispuso que habrá intenso control con espirómetros para todos los vehículos, durante todo el fin de semana, en la ruta que da acceso al balneario.

El alcalde versus los vecinos

La reunión cumplida entre las autoridades, los vecinos y los comerciantes del balneario, a fin de evaluar las medidas preventivas, contó sin embargo con una ausencia destacada: la del alcalde de La Paloma, Alcides Perdomo, quien había propuesto cambios radicales para el festejo, los que no fueron de recibo.

Perdomo había propuesto trasladar el carnaval a un predio privado inmediato al centro de La Pedrera, calificando al asunto como “un problema de mierda”. Enfatizó en tal sentido: “Estoy hasta los huevos de esto. Cuando el senador Bordaberry saque la ley (de rebaja de la edad de imputabilidad) van todos presos” había dicho al diario El Observador.

La reacción fue fulminante contra el alcalde a tal punto que el intendente de Rocha, Artigas Barrios, le comunicó que a partir de ahora el vocero del carnaval será el propio jefe comunal.