“Tensa calma”

Marconi: saturación policial tras desacato de vecinos y muerte confusa de un joven baleado

La Justicia intenta esclarecer si las balas que mataron a un joven en el barrio Marconi, durante un tiroteo entre policías y vecinos, procedía de un arma de los uniformados o de alguno de quienes se desacataron ante la autoridad.

Captura de «Yo soy Marconi»

El barrio Marconi está saturado de policías e integrantes de la Guardia Republicana, tras los desmanes registrados el domingo, cuando se procedía a la detención de los responsables de la rapiña a una panadería de la zona.

Cuando la policía los llevaba arrestados, los vecinos comenzaron a apedrear a policías y patrulleros y la violencia se generalizó. Allí resulto muerto un joven tras lo cual el barrio ardió.

Cuatro vehículos por lo menos fueron incendiados, entre ellos, dos taxímetros que estaban prestando servicio en el barrio y fueron rapiñados.

El Jefe de Policía de Montevideo, Diego Fernández, dijo que la situación en Marconi es “de tensa calma”.

Agresores no son “la mayoría” del barrio

Según el jerarca policial quienes atacaron a los funcionarios no constituyen ni remotamente la mayoría del Marconi, sino que por el contrario los vecinos aceptan de buena gana que la policía los proteja.

Atribuyó los desmanes a una cincuentena de personas que componen pequeñas gavillas destinadas al robo y al tráfico de pasta base.

Durante los incidentes del fin de semana, cuando la Policía llevaba a ocho detenidos, hay dos versiones de lo ocurrido: según algunos vecinos los funcionarios se defendieron de la pedrea a los tiros.

La versión policial es que no solo fueron apedreados sin que les dispararon. En la calle quedó tendido el cuerpo de Álvaro Nicolás Sosa Gutiérrez, de 25 años, que no estaba con los rapiñeros ni era un delincuente, según los vecinos.

El Juez Nelson Dos Santos, a cargo del caso, deberá ahora dilucidar el asunto aunque adelantó que es “confuso”. Los policías enfrentan posibles cargos de “omisión de asistencia”, aunque no hubieran sido los autores de la muerte, ya que abandonaron el joven en la calle.

“Estaba desangrándose”, afirmó el concejal Juan Carlos Silva, del comunal D, que presenció algunos de los hechos. Nueve civiles están detenidos y hay cinco policías emplazados.

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